SIN TERCERA DOSIS SE CORRE RIESGO DE NUEVO PICO O UNA MESETA ALTA

De los poco más de 3,7 millones de vacunados, al menos 2,5 millones completaron la pauta de dos dosis a mediados de octubre pasado. De ese último grupo, hasta hoy, 1 millón de personas recibieron una tercera dosis anti-Covid, desde que se puso a disposición de la población –a fines de diciembre– este pinchazo de refuerzo. Esto significa que alrededor de 1,5 millones de personas que ya completaron la serie inicial de vacunación (1ª y 2ª dosis) pueden recibir o están habilitadas para el tercer disparo que brinda mayor protección ante variantes como ómicron.

En efecto, esa inyección de refuerzo se introdujo ante la evidencia de que los anticuerpos generados por las vacunas declinan entre el quinto y sexto mes, posteriores a la segunda dosis.

El actual escenario epidemiológico, que se muestra favorable a mediano plazo con la previsión de que las infecciones por Covid-19 caigan al suelo en marzo, podría verse alterado –en parte– por un nuevo pico de contagios o; en su defecto, una meseta alta de contagios. “Esa es una posibilidad también”, comparte la doctora Sandra Irala, directora interina de la Dirección General de Vigilancia de la Salud (DGVS), quien se basa a su vez en lo publicado por el Instituto para la Métrica y Evaluación de la Salud (IHME, en inglés) de la Universidad de Washington, Estados Unidos.

De acuerdo la proyección del IHME, si bien se prevé que los casos positivos vayan en descenso este mes, a partir de marzo se produciría un repunte siempre que no se cumplan con las medidas de protección y prevención, como el uso universal de mascarillas. De ese modo se tendría un nuevo pico con un promedio de 3.280 casos diarios.

En la misma tabla proyectiva, muestra que si la población accede a la tercera dosis, los casos caerían efectivamente con mayor rapidez este mes y no se daría ningún repunte. En tanto que el descenso en los contagios sería más acelerado sin esa dosis de refuerzo.

“El IHME, que usamos bastante para ir viendo cuál es la proyección para saber cuál es el escenario que nos espera, incorpora ómicron y ahí se incorporan los factores protectores”, explica Irala.

Y refiere que ese instituto toma varios parámetros: La amenaza es una nueva variante y ya se tiene con ómicron; la protección también y son las vacunas así como las medidas sanitarias. Estas últimas se relajaron a fin de año y en estos meses de verano de alta interacción; en tanto que la vacunación avanza de forma muy lenta.

“Todo eso es lo que hace que el escenario sea mejor o peor. Va a caer igual (la curva), pero va a caer más lento. Esa también es la diferencia. Va a caer igual porque, efectivamente, ómicron mostró en otros países que con diferentes coberturas de vacunación, con diferentes aplicaciones de medidas que cae igual”, argumenta.

No obstante, menciona que la diferencia subyace en la cantidad de hospitalizados y de fallecidos que se puedan dar si los casos se mantienen en una meseta alta o se disparen aunque sea por breve tiempo. “Inglaterra por más de que tuvo una cantidad de casos, no tuvo tantos fallecidos. Eso es la diferencia entre un país y otro. Y lo que hay es mucha inequidad en la distribución de vacunas. Para que digamos que la pandemia está terminando esa distribución de vacunas debe ser equitativa. Porque de lo contrario seguirán surgiendo las variantes en lugares densamente poblados con poca vacunación, poca adherencia a las medidas sanitarias, en donde la transmisibilidad es muy alta”, analiza.

barrera ante ómicron

Irala tiene una explicación sobre el por qué ese importante remanente de 1,5 millones de personas que puede aplicarse la tercera dosis y aún no lo hizo. “Ocurrió que tuvimos muchos infectados y la recomendación es que esperen un mes después para la vacunación. Todo puede influir porque el que se pone la tercera también es el que se quiere vacunar”, reflexiona.

En Salud, dice, consideran una vacunación completa cuando se tiene la segunda dosis y no pasó los seis meses desde la última aplicación. “A posteriori, vamos a hablar ya de vacunación completa cuando tenés la tercera dosis; pero ahora hablamos de serie primaria que son las dos primeras dosis y el refuerzo que es la tercera. Pero, si hablas de ómicron tendrías que tener las tres dosis para decir que la persona está protegida”, separa no sin dejar de observar la inminencia de sublinajes de esta variante como la circulante en la región, la BA.2.

Si bien todavía no se demostró que sea más transmisible que el linaje de ómicron que predomina en Paraguay y el mundo, la BA.1, se sabe que por sus características anatómicas estos virus mutados se robustecen en su capacidad de replicación. Esto hizo que con ómicron y sus sublinajes se hayan multiplicado las reinfecciones, tanto en vacunados como en no vacunados.

aptos. Más de 1,5 millones de vacunados pueden recibir el refuerzo y por alguna razón no lo hacen.

Protección. Ante ómicron se está protegido tras recibir el tercer pinchazo, asegura experta.